Ruinas y polvareda cubren cuerpos inocentes ayer vivos... hoy inertes.
Pagaron un pecado incontables seres humanos que a nadie hicieron daño.
Justos por pecadores... lo que la mente demente provocó la muerte sin piedad, cosechó.
Día acíago en USA, Washington y Nueva York no vió nacer el sol herida nación impactada directo al corazón.
Y el resto del mundo... impotente ven el escenario de muerte y dolor de desconocidos, viajando juntos al paraíso, sin alcanzar a decir... una última oración.
Que encuentren alivio y descanso en un mundo mejor lejos de la codicia y la ambición libre de asesinos, al lado de Dios.
Septiembre 11/2001
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