Si pudiera tener alas, volaría alto
tan alto, donde nadie me viera...
sentir el aire puro, respirar en libertad.
Ser potrillo recién nacido
que a pesar de estar débil e indefenso,
parándose con esfuerzo, se va a alimentar.
Tal vez una gran jirafa
mirando un fruto lejano,
descubre que estirando el cuello
lo puede alcanzar.
Porqué no ?... una golondrina
que anticipándose al frío
cruza los ríos
hasta encontrar de nuevo el sol.
O el que instintivamente
se sumerge en un sueño invernal,
para recobrar fuerzas
y volver a comenzar.
Es que, soy sólo un ciervo herido
al que le arrancaron el corazón
y al mirar al asesino...
era un hombre...
No un león.
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